CUIDA TU CARRUAJE DÁNDOLE LO QUE NECESITA CONSCIENTEMENTE

¿Es habitual que te descubras comiendo sin pensar, como si estuvieras en trance?

¿Estas utilizando la comida como muleta para sobrellevar el estrés de tu vida?

¿Recurres a la comida para llenar un vacío emocional?

¡¡¡Date un respiro!!! :

La alimentación con conciencia plena nos ayuda a volver a escuchar lo que nuestro cuerpo nos está diciendo acerca del hambre y la saciedad. Nos ayuda a reconocer que parte de nuestra integridad cuerpo-mente- corazón tiene hambre, y cómo, cuándo y qué es lo mejor para nutrirlo, para evitar las agresiones a la salud.

La alimentación “consciente” propone una salida del territorio de la sombras e inseguridades que conllevan los regímenes más comunes.

La idea es vivir en armonía con el cuerpo, comiendo cuando realmente tenemos hambre y parando cuando nos sentimos llenos.

La mayoría de personas a dieta entran en un círculo vicioso de privación, sobrealimentación y culpa que a menudo termina con kilos adicionales.

comida y salud

No se consigue la salud y el peso ideal con una sola comida, ni se engorda con un aperitivo. Lo que podríamos tener en cuenta es la regularidad. Son los buenos hábitos los que determinan nuestro peso.

Tu propia mente va a ser un gran aliado o un tremendo enemigo para conseguir un hábito saludable en tu nutrición.

Para conseguir tu peso ideal, no sólo es necesario manejar tu alimentación y la cantidad de ejercicio que hagas cada día, sino también tu modo de relacionarte con la comida y con tus propios estados mentales y emocionales. Aquí es donde el MINDFULNESS puede servirte de gran ayuda.

Observa esta semana cómo comes, si es despacio, si saboreas, si masticas los alimentos lo suficiente, si distingues los sabores de cada alimento…Empieza por convertirte en un observador. Después diseña tu plan de acción. Si observamos a las personas comer, vemos que muchas de ellas comen corriendo, con ansiedad y mezclando alimentos, unos con otros , tragándolos como si buscaran llenarse lo antes posible. También podrás observar que otros, mientras comen miran la tele, o hacen cualquier otra cosa, sin ser del todo conscientes de las cantidades que están  comiendo.

Comer con total atención es mucho más agradable y placentero que estar comiendo distraído en otra tarea. Después de haber estado practicando como “observador” de tus hábitos y de los hábitos de los que te rodean, podemos pasar al punto dos; liberarnos de nuestras rutinas del “piloto automático” dejar de hacer inconscientemente una y otra vez, aquello que ha permitido , por ejemplo, aumentar de peso, etc.

Y por si no se te ocurre cómo empezar un plan de acción, aquí te dejo unas ideas:

  • Come despacio
  • Agradece que puedes comer
  • Intenta hacer varias comidas al día de una proporción pequeña, un plato, 5 veces al día.
  • Haz pausas para registrar el nivel de hambre y saciedad
  • Cuando creas que tienes hambre, primero prueba y bebe agua, si se pasa ese vació, posiblemente no es hambre.
  • Haz ejercicio.
  • Escribe tus declaraciones de intenciones como principal estrategia.